"Alberto Vázquez-Figueroa no es solo un escritor consagrado. Es también
el inventor de un sistema de producción de energía que a la vez desala el
agua de mar. El principio es muy simple: subir agua de mar a lo alto de una
colina en las horas valle (es decir, las de menor consumo), y dejarla caer
en las horas punta. El sistema está preparado para que parte de esta agua
se desale al caer. Es posible obtener energía y agua potable con un coste
mínimo de esta manera. No es el fruto de la imaginación de un novelista:
el proyecto está perfectamente detallado y contó con el exhaustivo apoyo
del Ministerio de Medio Ambiente… hasta que las presiones de quienes
se sentían perjudicados obligaron a archivarlo. Corría el mes de enero
cuando Alberto Vázquez afirmaba en su blog que no pensaba dedicar ni
un minuto más, ni un pensamiento más al tema del agua…"
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fuente: Revista Athanor
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