Hipnotizados por el fútbol;
hipnotizados por el olor a cirios;
hipnotizados por la nicotina;
hipnotizados por la sangre roja del toro malherido;
hipnotizados por el “Gran Hermano”;
hipnotizados por los teleprogramadores de televisión;
hipnotizados por el sexo;
hipnotizados por el trabajo compulsivo;
hipnotizados por la lotería;
hipnotizados por el poder;
hipnotizados por la fama;
hipnotizados por el dinero;
hipnotizados por la vanidad;
hipnotizados por el orgullo;
hipnotizados por la soberbia;
hipnotizados por la comida;
hipnotizados por la propaganda;
hipnotizados por el show-business;
hipnotizados por los coches caros;
hipnotizados por el integrismo religioso;
hipnotizados por el cine;
hipnotizados por la publicidad;
hipnotizados por la pantalla del ordenador;
hipnotizados por Bin Landen;
hipnotizados por el rock;
hipnotizados por el pop;
hipnotizados por las marcas comerciales;
hipnotizados por Bush;
hipnotizados por la “coca”;
hipnotizados por el “costo”;
hipnotizados por los Oscar de Hollywood;
hipnotizados por los barbitúricos;
hipnotizados por las apariencias;
hipnotizados por el juego;
hipnotizados por la moda;
hipnotizados por la Bolsa;
hipnotizados por los medios de (in)formación de masa;
hipnotizados por el papel couché;
hipnotizados por la radio;
hipnotizados por los políticos mentirosos;
hipnotizados por Disney World;
hipnotizados por los telediarios;
hipnotizados por los gurús;
hipnotizados por la importancia personal ...
Hipnotizados, hipnotizados, hipnotizados ...
se nos va la vida,
día tras día,
año tras año.
¿Quién fue quien dijo:
“¡Lázaro! Despiértate y anda”?
Dokushô Villalba
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire